Un crimen sin motivo aparente
La Guardia Civil mata a un hombre que asesinó a su hermana en Badajoz
Publicidad
La Guardia Civil abatió ayer a tiros a un hombre de 37 años, después de asesinar a su hermana y herir a otras tres personas con un cuchillo. La tragedia sucedió en Oliva de la Frontera, un pequeño municipio de 6.000 habitantes situado a 82 kilómetros al sur de Badajoz. Sus habitantes se encuentran conmocionados y abatidos por el crimen. Todo ocurrió en muy poco tiempo.
Publicidad
José Manuel Aguedo, apodado en el pueblo como El Bueno, apareció sobre las 9 de la mañana en casa de unos vecinos, un hombre de 54 años y una mujer de 55, a quienes agredió con un pico, aunque de levedad. Uno de ellos fue dado de alta a las pocas horas. Posteriormente, acudió a su casa, adonde llegó también su hermana, de 26 años y trabajadora en los Servicios Sociales del Ayuntamiento.
Contra su hermana
Tras mantener una discusión fuerte, El Bueno, se abalanzó sobre la chica y la apuñaló en el abdomen con un cuchillo de cocina. Murió casi en el acto.
Fuera de sí, el agresor salió de nuevo a la calle y apuñaló de gravedad a una mujer de 75 años. La anciana fue intervenida de urgencia en el Hospital Infanta Cristina de Badajoz por una "herida penetrante", y continúa ingresada y en observación.
Publicidad
La Guardia Civil llegó al lugar de la sangría e intentó reducir al hombre a golpes de porra. Resultó inútil. Fuentes de Delegación del Gobierno relataron que un agente disparó entonces a la pierna del atacante. Tampoco fue suficiente.
Sin inmutarse amenazó de muerte a los guardias y se lanzó, con un cuchillo y un pico ensangrentados, sobre ellos, que repelieron la agresión con un segundo disparo que resultó mortal. La bala impactó en el pecho del agresor y falleció casi al instante.
Publicidad
Las autoridades investigan qué pudo llevar a El Bueno a actuar de esta manera tan irracional y salvaje. Al parecer, nunca se había producido ninguna denuncia por actitudes violentas contra este individuo, un hombre soltero que vivía con su madre. Algunos vecinos sí reconocieron que, aunque habitualmente no tenía un comportamiento agresivo, "a veces cuando bebía se le iba la cabeza".
La delegada del Gobierno en Extremadura, Carmen Pereira, no pudo precisar si la joven fallecida estaba embarazada. Las autoridades han decretado dos días de luto oficial.