La Comisión Electoral rechaza candidaturas de cientos de reformistas
Publicidad
La Comisión Electoral iraní ha rechazado las candidaturas de cientos de reformistas inscritos para participar en las elecciones parlamentarias iraníes, previstas para el próximo 14 de marzo, informaron hoy fuentes políticas.
Publicidad
Entre los rechazados figuran al menos 20 diputados del actual Parlamento, integrado por 290 miembros y controlado por los conservadores, la corriente del presidente del país, Mahmud Ahmadineyad.
Según un comunicado oficial, de los 7.200 iraníes inscritos como candidatos para los comicios del octavo parlamento de la República Islámica, se han aceptado 5.000 candidaturas, un millar de ellas en Teherán.
En la nota, difundida por los medios de comunicación locales, no se distingue entre reformistas o conservadores, al tiempo que se destaca que un 69 por ciento de los inscritos han sido declarados aptos para participar en los comicios.
Publicidad
El rechazo del 31 por ciento restante se atribuye a diferentes razones y se señala que no pueden presentarse a las elecciones quienes "están inclinadas hacia el régimen anterior" del Shá Mohamad Reza Pahlavi, derrocado por la Revolución Islámica en 1979.
También se rechaza a personas acusadas de actuar contra los principios de la República Islámica, participar en disturbios, pertenecer a grupos "separatistas y terroristas" o de estar relacionadas con servicios secretos extranjeros.
Publicidad
En el comunicado, que no precisa el porcentaje de las personas rechazadas por distinción de sexo, se añade que todas las personas cuya candidatura ha sido rechazada tendrán un plazo hasta el próximo sábado para presentar sus quejas contra la decisión de la Comisión Electoral.
El pasado 11 de enero, cuando finalizó el plazo de siete días de inscripción para los aspirantes, las autoridades anunciaron que de los 7.200 personas, 6.600 eran hombres y 590, mujeres.
Publicidad
El rechazo de candidatos reformistas dejaría sin importantes rivales a los aspirantes ultraconservadores y tradicionalistas en las próximas elecciones, que, para numerosos comentaristas, serán un examen sobre la popularidad de la corriente de Ahmadineyad.
Mientras se acercan los comicios, en el interior del país crecen las críticas por el aumento de la inflación, que fuentes no oficiales sitúan entre 19 y 30 por ciento, y que numerosos iraníes atribuyen a las políticas económicas del Gobierno de Ahmadineyad.