Clinton y Lavrov mantienen "constructiva" conversación sobre Siria
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La secretaria de Estado de EE.UU., Hillary Clinton, mantuvo hoy una conversación telefónica "constructiva" con su homólogo ruso, Sergei Lavrov, acerca del debate en el seno de la ONU de una posible resolución sobre Siria.
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"La secretaria de Estado habló esta mañana con Lavrov. Ambos acordaron que sus equipos en Nueva York seguirían consultando sobre este proyecto de resolución", dijo el portavoz adjunto del Departamento de Estado de EE.UU., Mark Toner, en su conferencia de prensa diaria.
Toner no quiso entrar en detalles sobre el contenido del diálogo, que se produjo desde el avión que llevaba a Clinton de viaje a Munich (Alemania), y se limitó a calificarla de "constructiva".
La conversación se produjo después de varios intentos frustrados por parte de Clinton de contactar con Lavrov y que fueron justificados por Moscú debido al viaje del ministro a Australia.
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Además, coincidió con el rechazo de Rusia del último borrador de resolución del Consejo de Seguridad de la ONU, con el argumento de que no tiene en cuenta todas sus preocupaciones y las de sus aliados sobre la situación en Siria.
Desde Australia, Lavrov aseguró hoy que Moscú no permitirá nunca la adopción de una resolución que allane el camino para una intervención militar en Siria e incluya una demanda de renuncia del presidente Bachar Al Asad.
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"La política rusa no consiste en pedir a alguien que dimita. Los cambios de régimen no son nuestra profesión", afirmó.
Moscú acusa a Estados Unidos de querer aplicar en Siria el guión libio: sanciones internacionales, embargo aéreo, intervención militar occidental y cambio de régimen.
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Clinton descartó el martes esa idea de que se quiera convertir a Siria en "una nueva Libia", que tachó de "analogía falsa".
Tras la negativa al borrador marroquí, el Consejo de Seguridad de la ONU espera hoy conocer cuáles son las modificaciones que Rusia quiere aplicar al último proyecto de resolución acordado, y que trata de aumentar la presión internacional ante la represión en el país árabe, que hasta el momento ha dejado casi 6.000 muertos.