El 'caso McDonald' pone en peligro las fichas de los extranjeros

La voluntad del Tau Vitoria de inscribir al estadounidense Will McDonald para la Liga en calidad de jugador comunitario puede desembocar en una situación completamente inédita en el baloncesto español ya que, en estos momentos, todos los jugadores extranjeros corren el peligro de no recibir ficha para empezar el campeonato dentro de una semana en tanto en cuanto no se resuelva el conflicto.

El pacto que regula el marco de contratación de la Liga ACB, suscrito en 2005 por la Federación Española, la Asociación de Baloncestistas Profesionales (ABP) y la Asociación de Clubes, está formalmente roto y la solución del conflicto ha en manos del Consejo Superior de Deportes (CSD).

"Ahora nadie puede hacer nada. Las partes hemos tenido unos tiempos donde ha habido diálogo y hemos intentado llegar a una solución, pero la ACB, unilateralmente, decidió interponer un conflicto de interpretación mientras estábamos en conversaciones. Ante eso, entendimos que daban el diálogo por cerrado", explicó a EFE Chus Bueno, director general de la FEB.

La postura del Tau ha reabierto el conflicto sobre los cupos de jugadores en la Liga. McDonald, cuya esposa, de nacionalidad española, asegura en una entrevista en el diario 'Público' que no recuerda ni dónde se casó, ha podido disputar la Supercopa porque no es una competición oficial, pero su alineación como comunitario en este torneo ni siquiera era necesaria puesto que el Tau no dispone del estadounidense Pete Mickeal -lesionado-.

"El hecho de que la ACB acudiese en pleno diálogo al CSD y de que haya manifestado que estos jugadores deben entrar en el cupo de europeos significa, inequívocamente, que ha roto el pacto", indicó a EFE Chus Bueno.

El director general de la FEB explicó que "el presidente -de la Federación, José Luis Saez- se dirigió a Eduardo Portela -presidente de la ACB- para que corroborase esta línea y le manifestó que, si no le indicaba lo contrario, entendía que seguían el mismo camino, que el acuerdo estaba roto y que, por tanto, de acuerdo a la normativa legal, se debía convocar a las tres partes para fijar un nuevo marco de extranjeros".

La reunión entre todas las partes se convocó para el sábado por a las 10.30 horas en la sede de la FEB, pero ningún representante de la ACB acudió a la misma. Un portavoz de la Asociación de Clubes indicó a EFE que la actividad de la Supercopa hacían imposible la presencia de sus interlocutores en la mencionada reunión.

"Entendemos los problemas de agenda, pero también entendemos que, dada la importancia del asunto, sobre todo para los clubes, a los que deberíamos proteger y dotarles lo antes posible de un marco de contratación que dé estabilidad, debía ser una reunión urgente, ya que la Liga empieza la semana que viene", apuntó a EFE Chus Bueno.

El federativo subrayó que "La Liga ACB no ha acudido a la reunión y tampoco ha convocado otro encuentro, así que, conforme al Real Decreto de Federaciones, la decisión final sobre el número de extranjeros se debe trasladar al CSD".

"Esta mañana le hemos hecho llegar el acta de la reunión al CSD con el desacuerdo sobre el número de extranjeros para que decida lo antes posible y los clubes sepan el marco en el que se encuentran", agregó.

"La Liga puede empezar. Los jugadores nacionales y comunitarios no tienen ninguna restricción. Los extranjeros es lo que queda por determinar", dijo a EFE Chus Bueno.

Es decir, que la ACB corre el peligro de vivir otro episodio de desencuentro de tremendas consecuencias puesto que, a la espera de lo que decida el CSD, ahora mismo cabe la posibilidad de que ningún jugador que no sea nacional o comunitario reciba la correspondiente licencia.

"Es una lastima comprobar la situación sobre estos casos a través de los medios. Empañan un inicio de Liga que podía ser inmejorable aprovechando el éxito del Europeo", comentó a Efe Chus Bueno.

Hace dos años, durante la negociación del convenio de coordinación, se sucedieron bodas de jugadores que, de ese modo, entraban a la ACB como españoles asimilados, sin ocupar plaza de extranjero.