La aseguradora francesa Axa anunció hoy una caída de su beneficio neto del 28% en el primer semestre del año hasta los 944 millones de euros como consecuencia de una provisión excepcional de 1.478 millones de euros vinculada a la cesión de una parte de sus actividades en el Reino Unido.

Axa subrayó en un comunicado que si se elimina dicha provisión de los resultados por la cesión a la británica Resolution de una parte de sus seguros de vida, ahorro y pensiones, su beneficio neto en el primer semestre del año avanza un 81% hasta los 2.422 millones de euros, frente al mismo período del año anterior.

Descontado ese resultado excepcional, el resultado operacional del grupo cayó un 3% en relación con la primera mitad de 2009 hasta los 2.082 millones de euros, que se explica por la caída de la contribución de los segmentos de "daños" y de "gestión de activos", así como de los ingresos financieros, señaló Axa.

Entre enero y junio, el resultado corriente del grupo avanzó un 29% hasta los 2.248 millones de euros.

El volumen de negocios avanzó, no obstante, un 1% entre enero y junio para alcanzar los 49.925 millones de euros.

El presidente del grupo, Henri de Castries, destacó la "solidez" del resultado operacional, de la capacidad de la aseguradora para "mejorar la calidad" y el "fuerte avance" del resultado corriente del grupo.

Por otro lado, la aseguradora anunció el nombramiento de tres directivos en el seno del grupo.

François Pierson, de 63 años, se consagrará "completamente" a la dirección internacional de las actividades de la aseguradora en el campo de "daños" y será reemplazado en su puesto por Nicolas Moreu, de 45 años, quien pasará a ocuparse de la dirección de Axa en Francia.

Por su parte, Paul Evans, de 45 años, será el nuevo director general de la aseguradora en el Reino Unido, informó Axa, que agregó que las tres decisiones se harán efectivas a partir del próximo mes de octubre.