El grupo financiero Bankia más que duplicó su beneficio atribuible a cierre del primer trimestre de 2014 hasta alcanzar los 187 millones de euros en unos resultados que estuvieron marcados por la primera reducción de la mora desde el inicio de la crisis.

Por su parte, el margen de intereses ya vislumbró una mejora del 16,1% a 698 millones a marzo frente a una previsión de 703 millones de euros y confirmó en parte la continuación del cambio de tendencia que empezó a registrar Bankia en el transcurso de 2013. La mayoría de los analistas coincidieron en destacar como factor positivo de los resultados de la entidad nacionalizada la mejora en la evolución de la tasa de impagos, que se redujo al 14,31% desde el 14,65% anterior.

La caída de la morosidad del grupo, receptora de ayudas públicas por 22.424 millones de euros, sigue la línea de otras entidades como Caixabank o Sabadell, que también han mostrado descensos de la mora durante el primer trimestre, una nueva muestra de la tímida recuperación de la economía española. A marzo, Bankia logró reducir en 842 millones de euros el saldo de riesgos dudosos a 19.180 millones de euros en un momento de incipiente recuperación económica en España a pesar de que la tasa de paro se sitúa todavía en niveles elevados cercanos al 26 por ciento.

El director general de Presidencia de Bankia, José Sevilla, manifestó que la entidad no tenía objetivos cuantificados de reducción de la morosidad si bien vaticinó que ésta iría bajando acompañada de la actual recuperación económica. 'Vislumbramos alcanzar una velocidad de crucero que supondría reducir las entradas de mora al trimestre en unos 500 millones de euros, lo que supondría reducirlas en unos 2.000 millones en el conjunto del año', añadió.

Otro aspecto favorable de la cuenta de resultados fue la reducción de sus gastos de explotación en un 10,1% a 441 millones de euros tras la reestructuración del grupo. El directivo, que no quiso dar estimaciones concretas sobre beneficios a futuro que ligó a la evolución de la economía, reafirmó, no obstante, que el objetivo del grupo BFA-Bankia era cerrar 2014 con un beneficio de 1.100 millones de euros tras haber cerrado marzo con un aumento del 17,4% a 250 millones de euros.

En un momento en el que el capital es principal caballo de batalla de las entidades en Europa antes de la revisión de la calidad de los activos y de las pruebas de resistencia en el transcurso del año, Bankia logró terminar el primer trimestre con un ratio de solvencia en términos de Basilea III fully loaded o totalmente anticipado por el mercado del 9,12% desde el 8,6% de diciembre. Por su parte, terminó marzo con un ratio de capital del 10,91% frente al 10,69% de diciembre.

Los directivos de Bankia se mostraron el lunes optimistas con que la banca española y en concreto Bankia pudieran salir razonablemente bien paradas de las pruebas de resistencia que tienen que previsto realizar tanto el Banco Central Europeo como la Autoridad Bancaria Europea (EBA) en este ejercicio después de las fuertes provisiones y de la reciente recapitalización a la que se ha sometido en el pasado. En 2012, el Gobierno recibió un préstamos de los socios europeos por importe finalmente de unos 41.300 millones para contribuir a sanear a la banca castigada por los activos tóxicos inmobiliarios.

Respecto a nuevas ventas de participaciones por parte del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), tras la enajenación del 7,5 por ciento realizada a finales de febrero, Sevilla insistió en que correspondía al ente público tomar la decisión sobre el siguiente proceso de privatización. 'La decisión la tiene que tomar el FROB (...) había un período de no colocar más en tres meses, que vence a finales de mayo o principios de junio , pasada esa fecha tendrá que ser el FROB el que mira si hay opciones o no, nosotros tratar de facilitar que sea posible esto', dijo Sevilla, que reconoció el interés de la banca de inversión en trabajar en este proceso.