La crisis también ha afectado al mercado del arte, pero en tiempos de vacas flacas no hay que esconderse: eso parecen haber pensado los artistas españoles que esta semana exponen sus obras en CIGE (China International Gallery Exposition), la principal feria de arte de Pekín.

Con dos galerías (Fernando Alcolea y Moriarty), un expositor institucional de Casa Asia y SEACEX y una exposición individual, la del pintor y fotógrafo José Manuel Ballester, España es uno de los países mejor representados en la exposición en este "año de la crisis", que según los galeristas se nota más en los nombres famosos y menos en el arte que se muestra en CIGE.

"Es un mal momento para los grandes nombres, pero para los artistas jóvenes siempre ha sido difícil y la crisis no nos ha afectado en gran medida", destacó a Efe Fernando Alcolea, fundador de la galería homónima y que expone trabajos de Jorge Usán, Ramón Roig (los dos residentes en Pekín) y el barcelonés Ángel Bofarull.

Moriarty, por su parte, muestra la original obra de Juan Zamora, un dibujo casi infantil, como un boceto a bolígrafo, que a veces salta del cuadro y se convierte en un muñeco que flota fuera del marco.

Las fotografías de Ballester muestran imágenes de España y de China, en las que el Teatro Real de Madrid y el Teatro Nacional de Pekín comparten protagonismo.

Casa Asia, por su parte, se decanta por el vídeo-arte, mostrando en su stand las obras de 50 artistas españoles, algunos tan conocidos como Alberto García Alix o Joan Fontcuberta.

"Los hemos agrupado por afinidades estéticas, un tipo de producción que sabemos que puede interesar al público chino y a los artistas que trabajan aquí, donde este soporte (el vídeo) es muy popular", explicó a Efe Menene Gras, directora de cultura y exposiciones de Casa Asia, institución que expone en CIGE por tercer año consecutivo.