OVIEDO.- Dos de las siete personas heridas a consecuencia de un atropello en el centro de Oviedo se encuentran graves aunque han podido ser estabilizadas mientras que las otras cinco sufren politraumatismos, según ha señalado el concejal de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de Oviedo. No obstante, ninguno de los heridos presenta lesiones que pongan en peligro su vida.

El conductor, un hombre de entre 60 y 70 años, ha dado negativo en el control de alcoholemia al que ha sido sometido por la Policía Local tras ser detenido. Se encuentra en los calabozos de la Policía Local a la espera de pasar a disposición judicial una vez que se le practique un control de drogas.

El siniestro se ha producido a las 14.30 horas cuando el vehículo, un Hyundai, circulaba desde la calle Santa Cruz ha girado hacia la calle Argüelles y ha invadido una isleta repleta de peatones que caminaban por la zona, la principal arteria comercial de Oviedo.

Los heridos, tras recibir asistencia médica en el lugar de los hechos, la plaza de la Escandalera de la capital asturiana, han sido trasladados en ambulancia a centros sanitarios.

Testigos presenciales han descrito el panorama dantesco que presentaba la zona minutos después del incidente: heridos tendidos sobre el asfalto entre trozos de semáforo esparcidos por el suelo.

El impacto del vehículo ha derribado el semáforo de la isleta y ha arrollado a los peatones que esperaban para cruzar a través del paso de cebra.

El conductor ha seguido circulando todavía algunos metros en dirección a la calle Argüelles, donde ha estado a punto de colisionar con un autobús, y ha podido ser detenido pocos metros más adelante por una patrulla de la Policía Nacional.

Tras ser detenido, el conductor ha sido trasladado a los calabozos de la Policía Local de Oviedo a la espera de ser puesto a disposición judicial.

Según Antuña, por el momento se desconoce si el vehículo circulaba a una velocidad inadecuada ni si ha intentado huir tras provocar el atropello o si únicamente ha seguido circulando por la inercia del turismo que conducía.

Fuentes policiales han indicado que el detenido habría manifestado en su primera declaración tras ser arrestado que había confundido el pedal del freno con el del acelerador lo que determinó que el coche invadiera la isleta con gran violencia.