Alonso asegura que si hay recortes será por decisiones políticas y no por la reforma

El portavoz del PSOE en el Congreso, José Antonio Alonso, ha negado hoy que la reforma constitucional conlleve recortes sociales y ha advertido de que si en el futuro se producen en alguna administración se deberá a la evolución de la economía y a las decisiones políticas de sus responsables.

Alonso ha subido a la tribuna para responder en nombre de los socialistas a las enmiendas presentadas por los distintos grupos y se ha detenido en las de CiU, a cuyos diputados ha tendido la mano para que se sumen al consenso.

No obstante, ha avisado a los nacionalistas catalanes de que no no son admisibles sus propuestas que abogan por respetar la autonomía financiera de las comunidades y que cada una de ellas pueda fijar el límite máximo de déficit, porque eso debilitaría la finalidad de la reforma.

Ha querido defender de nuevo las razones que obligan a hacer ahora esta modificación constitucional para constitucionalizar una regla financiera que afecte a todas las administraciones públicas en su conjunto y ha argumentado que "la estabilidad es un valor importante para las generaciones presentes y más que va a serlo para las generaciones futuras".

Por eso, ha insistido en que esta reforma es necesaria para garantizar el bienestar de la ciudadanía, dado que un déficit excesivo obligaría a trabajar para pagar los intereses y no quedarían recursos para hacer políticas sociales en beneficio del interés colectivo.

También ha recordado que se han introducido criterios de flexibilidad y circunstancias excepcionales, como catástrofes, emergencia extraordinaria si queda perjudicada la sostenibilidad económica o social, o recesión económica.

Alonso ha negado que la reforma suponga recortes sociales y ha dejado claro que si en el futuro hay ajustes, será una decisión de los responsables políticos de turno y de la evolución de la economía.

En este punto, ha ratificado la voluntad del PSOE de mantener todas las políticas sociales y ha recordado que, pese a "la durísima crisis", los socialistas han mantenido el nivel de conquistas sociales.