El mexicano Javier Aguirre, entrenador del Atlético de Madrid, reveló hoy que le ha dicho "todos los días" a sus futbolistas que aparten la "euforia", tras el triunfo frente al Barcelona, porque el equipo está en un "momento complicado", ya que aún no ha conseguido nada esta temporada.

"He estado muy alerta con mis jugadores. Todos los días les he mencionado que apartemos la euforia, que nuestras declaraciones sean de respeto y humildad. Hay que ser humildes en la victoria y en la derrota. Son profesionales y adultos y saben qué decir, pero les he pedido que no se contagien", explicó.

"La gente es libre de pedirte autógrafos y los periodistas de ensalzar o reprochar, pero ellos tienen que ser inteligentes para distinguir en qué momento está el equipo. Y el equipo está en un momento complicado, porque todavía no tenemos nada", agregó.

"Somos cuartos -continuó-, pero faltan muchos puntos y estamos a merced del quinto y del sexto. También estamos a un partido de los terceros. Además, es una semana en la que el primero juega contra el quinto y el segundo contra el tercero. Nosotros somos cuartos y podemos, si sacamos bien el partido, vernos hasta beneficiados".

En la charla previa al duelo en Zaragoza, les dirá a sus futbolistas que estén "atentos los primeros minutos". "No es una frase que cae en saco roto. Creo que el Zaragoza va a salir a por todas, porque el técnico lleva muchos años sin estar en Primera y por el entusiasmo que tendrán sus jugadores ante su público", opinó.

"Hay que estar muy pendientes durante los primeros minutos. Va a ser muy, muy importante. Eso le voy a decir a mis jugadores. Y, después, que juguemos al fútbol. No es porque sea el rival el que te motive especialmente, sino porque eres el Atlético de Madrid, tienes un compromiso con tu afición y la gente que te fichó de entregar cuentas el 18 de mayo y estamos en el camino correcto", dijo.

"Eso -añadió- siempre les pido, que estén atentos y conscientes del equipo en el que están, del rol que desempeñan, porque a veces da la sensación de que nos olvidamos del impacto social del equipo o de la caja de resonancia que tiene, de lo que una palabra puede significar, como ayer la broma esa de 'Kun' a la hora de marcharse".

"Es una broma y el contenido de la entrevista, que es buena a mi juicio, queda de lado por el titular de la broma. O la broma también de Maradona se le da transcendencia porque es el Atlético de Madrid. Hay que estar muy pendientes de lo que uno hace y dice con este equipo. Y eso se lo he trasladado a los jugadores, que ya lo saben, pero es mi obligación recordárselo", continuó.

También recalcó que le "ocupa" estar pendiente del argentino 'Kun' Agüero por la euforia que haya podido generar su espectacular actuación ante el Barcelona. "Ver los horarios de comida, de sueño, de maquinita... Y no sólo él, sino los más jóvenes, la gente que necesita los consejos de un hombre mayor. Somos formadores con gente. Nuestra labor no termina en la hierba", apuntó.

El Atlético llegará a Zaragoza tras ganar al Barcelona. Ese triunfo, según él, supuso "recuperar la autoestima, el sentido de grupo y la organización sin la pelota, que es muy importante". "Un equipo como el nuestro debe entender que tiene mucha calidad, pero también tenemos que cubrir las dos facetas, con pelota y sin ella. Los jugadores se han imbuido de ese espíritu de sacrificio", añadió.

La victoria ha devuelto la confianza al equipo, aunque el técnico se pregunta si pronto volverá a verse ese conjunto tan fiable de los pasados meses de octubre y noviembre. "Es la primera semana desde hace tiempo que ganamos y que tenemos semana larga para trabajar relajados y concentrados y no pendientes del viaje de mañana o si la vuelta de tal marcador, que quieras o no te puede distraer", dijo.

"A ver si con esta semana tranquila somos capaces de salir bien en Zaragoza. Enfrente estará un equipo con necesidad, con cambio de técnico y que querrán los jugadores demostrarle a él y su afición que son válidos. Va a ser un partido de necesitados", recalcó.

El técnico explicó que "no debería existir" diferencia entre la imagen de su equipo contra el Barcelona y la que ofrecerá en Zaragoza. "Está claro que a todos nos gustó el del Barcelona y nos gustaría a todos seguir viendo ese Atlético", declaró.

"La otra imagen no era la mejor. No fue la que esperábamos. No estuvimos a la altura y perdimos oportunidades de seguir vivos en dos competiciones y de despegarnos del quinto lugar. Afortunadamente hay tiempo para retomar la línea, hubo autocrítica y se consiguió un buen triunfo, pero nada más. Aun quedan mucha liga y no podemos ni debemos relajarnos ni sacar pecho, sino seguir igual", continuó.

El entrenador, incluso, consideró que tanto a él como a la plantilla se les "puede reprochar la irregularidad". "No hemos mantenido una regularidad de imagen, juego y resultados. A ver si ligamos en Zaragoza otra buena imagen, otro buen juego y ojalá el resultado nos acompañe", valoró.

El técnico superó contra el Barcelona su momento más comprometido en el banquillo del Atlético. "Siempre pretendo el equilibrio emocional y ser el mismo. Sé que a veces no lo logro y me gustaría ser un poco más gentil y extrovertido, pero me pasa por la cabeza que nuestro cargo tiene una volatilidad impresionante", declaró.