La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, dijo el lunes que su partido iba a aceptar una comisión parlamentaria que investigue la supuesta trama de espionaje a altos cargos madrileños.

Aguirre defendió que su interés era demostrar que en el seno de su administración no se habían ordenado seguimientos, dentro una trama destapada hace tres semanas por el diario El País y que ha llevado a distintas iniciativas judiciales y a una investigación interna en la formación conservadora.

"Quería anunciarles que el Partido Popular de Madrid va a aceptar la comisión de investigación en la Asamblea de Madrid, para dejar totalmente claro que nuestro interés es la transparencia, la claridad, la luz y los taquígrafos, y que se sepa que el Gobierno de la Comunidad de Madrid no ha espiado a nadie", dijo Aguirre a la prensa.

Según El País, el vicepresidente de la Comunidad, Ignacio González, y el vicealcalde de Madrid, Manuel Cobo, entre otros, fueron objeto de seguimientos que llevaron a la elaboración de dossieres sobre estos altos cargos.

El diario atribuyó algunos de estos seguimientos a un grupo de ex agentes policiales y guardias civiles que estarían a sueldo de la Consejería de Interior que dirige Francisco Granados.

Tras la comparecencia de este último el viernes en la Asamblea madrileña, PSOE e IU pidieron una comisión de investigación que abordara el asunto tras no quedar satisfechos con las explicaciones de Granados, que al igual que Aguirre ha negado con rotundidad que se estuviera espiando a compañeros de partido desde su departamento.